Hasta hace unas décadas, cambiar de coche era una experiencia que apenas se tenía tres o cuatro veces en la vida. A muchos de nuestros padres o abuelos le duraba cada vehículo al menos una década y siempre había uno de sus coches que la superaba con creces.
Pero ahora esto ha cambiado y les pedimos más a los coches: más seguridad, más innovación, más prestaciones adaptadas a nuestro día a día. Además, de la mano de muchas nuevas normativas e iniciativas de promoción que buscan un presente-futuro más amable con el medio ambiente, cambiar de coche es algo que cada vez hacemos con más frecuencia.
Así es que, esa idea del coche hasta que deje de andar ha cambiado de manera radical en los últimos tiempos. Y en realidad es una suerte, porque indica también que mejora la calidad tecnológica de nuestro medio de transporte de referencia. Y con ella, la seguridad.
«Quiero cambiar de coche porque…»
Motivos para cambiar de coche
Los motivos para que queramos sustituir nuestro coche y hacernos con uno nuevo son varias y todas sensatas:
- Cuanto más antiguo sea tu coche, más posibilidades tienes de que se averíe. Es decir, más dinero te vas a gastar en reparaciones, piezas, etc.
- Las averías no solo te van a llevar quebraderos de cabeza. También de seguridad: los coches de más de 10 años suelen acarrear problemas con elementos tan importantes como los frenos, el embrague o la correa de distribución.
- Los coches más actuales cuentan con unos sistemas de seguridad tanto activa como pasiva, mucho mejores que los más antiguos. El avance en seguridad en automoción no es tema baladí a la hora de decidirse por un coche nuevo.
- La sostenibilidad también se ha convertido en esencial. Y las emisiones de gases contaminantes en los vehículos antiguos es hasta un 30% superior a las de los más modernos.
- El ahorro que supone los motores de última generación también es un punto a favor del cambio. Y es que reducen en gran medida el consumo de combustible.
- La tecnología de última generación ofrece al conductor mayor conectividad. Y eso no solo le supone mayor comodidad, sino también mayor seguridad: asientos ergonómicos, pantallas multifuncionales, equipo de sonido, GPS…
- La existencia de carriles rápidos para coches menos contaminantes tal vez no sea un estímulo directo, pero es un argumento más para dar el salto de una vez si estamos empezando a considerar la idea y sufrimos las interminables retenciones matutinas de entrada a la ciudad.
Cambiar de coche con frecuencia es posible: opta por el renting
Quienes quieran contar siempre con las últimas novedades en seguridad, sostenibilidad y ahorro, cuentan en el renting con la mejor de las opciones porque pueden cambiar de coche con mayor frecuencia y despreocupación que si han de comprar y vender.