Hoy toca hablar de la Citroën Jumpy, la furgoneta media de la gama de vehículos comerciales de la marca francesa y que comparte gran cantidad de elementos con sus hermanas del Grupo PSA, la Peugeot Expert y la Opel Vivaro. Se trata de un modelo que destaca por su comodidad, su fiabilidad y sobre todo por su gran capacidad de carga, incluso en la versión más compacta de todas.
En este caso, de los tres tipos de carrocería que ofrece nos centraremos en la versión XS, que pese a ser la más pequeña (si es que se puede denominar así a una furgoneta) y medir “ tan solo” 4,6 metros de longitud, ya ofrece una capacidad de carga espectacular y una maniobrabilidad sin rival. Hay que tener en cuenta que las otras versiones alcanzan los 4,96 metros y la más larga alcanza los 5,31 metros, pero si os parece vamos a conocer qué tal se desenvuelve la Citroën Jumpy XS.
Conducción: noble y aplomada
La conducción de la Citroën Jumpy es, ante todo, cómoda y tranquila. Se disfruta de un buen nivel de insonorización a bordo, así como de un confort de marcha elevado. Por autopista se defiende bien gracias a la presencia del control de velocidad, mientras que por ciudad sus dimensiones de 4,61 metros de largo, 1,92 metros de ancho y 1,90 metros de alto nos facilitan tanto las maniobras como el estacionamiento en aparcamientos cubiertos.
En ámbitos urbanos el tacto de su dirección resulta ideal, ya que dispone de un gran radio de giro que facilita las maniobras. Además, gracias a la dirección asistida girar el volante es muy sencillo, y la visibilidad es fantástica gracias a sus retrovisores de gran tamaño.
En materia de seguridad dispone de los sistemas de control del vehículo más avanzados, como por ejemplo el control de tracción o el de estabilidad. Además, los airbags forman parte de la dotación de serie. Por su parte, su motor de 1.5 litros y 100 CV ofrece la fuerza necesaria para transportar objetos pesados sin problema, y todo ello combinado con un consumo de combustible muy ajustado.
Diseño atractivo y funcional
En cuanto a diseño, la Citroën Jumpy incorpora los elementos clásicos de cualquier Citroën moderno, con una parrilla que parece querer fundirse con unos faros situados muy en los extremos. En la vista lateral destaca la puerta corredera, mientras que en la zaga la estética es muy sencilla y práctica, con unos pequeños pilotos de nuevo situados en los extremos.
Como se puede comprobar todo está orientado a ofrecer la máxima funcionalidad posible, con unas líneas depuradas y sencillas que dan paso a una doble puerta posterior y la típica puerta corredera de cualquier furgoneta. De los tres tamaños de carrocería la versión XS es la que tiene la estética más compacta y proporcionada, contando con una serie de elementos acabados en plástico negro para soportar sin problemas el paso del tiempo y la dureza de la actividad diaria. Es el caso de los parachoques, los retrovisores, las manetas de las puertas o los faldones.
Finalmente, conviene destacar que las puertas posteriores cuentan con una apertura de hasta 180º, lo cual nos permite cargar elementos mediante un toro mecánico, lo cual resulta muy práctico.
Interior: amplitud y comodidad
En el interior de la Citroën Jumpy llama la atención el espacio disponible, especialmente teniendo en cuenta que nos encontramos ante la versión más pequeña de la gama. Y es que no hay que olvidar que estamos ante un vehículo de más de 1,90 metros de ancho, lo cual incrementa la sensación de amplitud. Su habitáculo es muy grande y la postura al volante es muy buena.
En esta versión disponemos de dos asientos que destacan especialmente por ofrecer una ergonomía muy bien trabajada, prácticamente idéntica a la de cualquier turismo. De hecho, son regulables en altura y longitud, como en cualquier Citroën equivalente. Disponemos de un pequeño escalón que nos facilita el acceso al interior, y la posición de la palanca de cambios hace que conducir la furgoneta sea realmente fácil.
En esta versión la capacidad de carga es de 5,1 metros cúbicos, o lo que es lo mismo: más de 5.000 litros de capacidad. Pero esta no es la única cifra impresionante, ya que también hay que tener en cuenta que la Citroën Jumpy XS supera los tres metros de longitud de carga y puede alcanzar los 1.400 kg de carga máxima.
Finalmente, me gustaría acabar este repaso al interior de la Citroën Jumpy hablando del panel de separación de carga, que cuenta con un elaborado aislamiento acústico y térmico para ofrecer un buen confort climático en el interior. Además, a bordo disfrutamos de aire acondicionado o conexión bluetooth, lo cual nos permite que los desplazamientos diarios sean lo más cómodos posibles.
Equipamiento de la Citroën Jumpy
El equipamiento de la Citroën Jumpy en su versión Talla XS BlueHDi Control cuenta con elementos de seguridad y múltiples opciones de funcionalidad que nos permiten cargar objetos fácilmente y además disfrutar de un elevado confort a bordo. Estos son los principales:
- Bluetooth: pese a tratarse de un vehículo comercial, la marca ha cuidado los detalles de conectividad que nos permiten conectar nuestro teléfono para realizar llamadas con total comodidad.
- Control de estabilidad: junto con el control de tracción, estos dos elementos nos permiten conducir de forma segura y sin tener que sufrir por perder el control del vehículo en ninguna circunstancia.
- Ordenador de abordo: la instrumentación y la pantalla central nos ofrecen una gran cantidad de información sobre la conducción, el estado del vehículo, el sistema multimedia o la conexión con el teléfono.
Otros elementos de equipamiento que forman parte de esta furgoneta son: aire acondicionado, control de velocidad, dos plazas, volumen de carga de 5,1 metros cúbicos, tapicería de tela, ABS, dirección asistida, elevalunas eléctricos, cierre centralizado o luces diurnas, entre otros.
Motor de la Citroën Jumpy
El motor de la Citroën Jumpy Talla XS BlueHDi Control es un bloque diésel de 1.5 litros de
cilindrada capaz de entregar una potencia de 100 CV y un par motor de 270 Nm. Equipa una caja de cambios manual de seis velocidades que transmite la potencia a las ruedas
delanteras, acelerando de 0 a 100 km/h en 15,4 segundos y alcanzando una velocidad máxima de 145 km/h. Por lo que respecta al consumo,homologa un gasto de 4,7 litros cada 100 km según el ciclo de homologación WLTP.
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