El Autogas o gas licuado de petróleo (GLP) es el combustible alternativo más utilizado en el mundo actualmente, y está empezando a imponerse entre los denominados coches ECO, tanto es así, que en España ya circulan más de 50.000 coches GLP.
Comparado con los coches de gas natural, los de gas licuado disponen de una mayor oferta de modelos y más estaciones de repostaje distribuidas en todo el territorio. Si lo comparamos con los de combustible tradicional, el litro de GLP sale mucho más económico. Más adelante entraremos en detalle, pues la economía nos toca el bolsillo a todos, y nos interesa pagar el menor precio posible.
¿Qué es el gas licuado de petróleo?
El GLP es un derivado del petróleo o del gas natural que ha sido sometido a presión y se convierte en estado líquido. Es una mezcla de butano, propano, polipropileno o butileno. Este gas ofrece las mismas prestaciones que la gasolina y el diesel, además, reduce las emisiones contaminantes y ahorra gasto en carburante.
¿Cómo funciona un coche de gas licuado?
Estos vehículos combinan dos tanques de combustible: uno convencional de gasolina y otro de gas licuado de petróleo. Por lo tanto, el propulsor es bifuel, es decir que está preparado para funcionar con ambos combustibles.
En los coches de GLP, este combustible se almacena en un depósito que suele estar instalado en el fondo del maletero. Un reductor-vaporizador regula la presión y lo convierte en el gas que alimenta los inyectores que lo llevan hasta los cilindros.
¿Qué se siente al conducir un coche GLP?
Algunos conductores dudan del funcionamiento de un coche propulsado por autogas, pero la realidad es que son muy parecidos a los de combustible tradicional. Tienen las mismas prestaciones, la misma tecnología e incluso el repostaje conlleva casi el mismo tiempo. ¿Y cómo es conducir un vehículo de gas licuado? Su conducción es más silenciosa, suave y sin vibraciones.
Ventajas de tener un coche de gas licuado
- Aunque su precio de adquisición es algo más elevado, se ve compensado por el gran ahorro en combustible. Cuesta casi la mitad que la gasolina y un 40% menos que el diésel.
- Los coches GLP tienen una bonificación en el pago del impuesto de circulación. El descuento suele estar en torno al 75%, dependiendo de cada ayuntamiento.
- Estos automóviles están clasificados con la etiqueta ECO, por lo que se benefician de un descuento del 50% en las tarifas de los parquímetros del SER.
- Al tener el distintivo ECO, pueden acceder a las grandes ciudades cuando se produzcan restricciones por exceso de contaminación ambiental.
- Derecho a circular por el carril BUS VAO (en determinadas condiciones).
- Los coches GLP se benefician de descuentos en los peajes dependientes de la Generalitat de Cataluña.
- Al tener doble depósito (de gas y de gasolina) la autonomía es mucho mayor que la que pueda ofrece un coche convencional.
Algunos modelos como el Fiat 500 Lounge Hibrido GLP y el Renault Clio Business TCE GLP encabezan las listas de coches de gas licuado más demandados en España actualmente. Sin duda, este nuevo combustible significa un avance en la reducción de emisiones contaminantes y un ahorro considerable en el consumo de combustible. Si te interesa hacerte con un coche GLP y otros modelos de vehículo ECO, consulta aquí toda nuestra oferta disponible de renting.